No entiendo tu forma de amar



No quiero palabras, ni tristezas en mi vida,
solo quiero un abrazo y un beso antes de dormir,
sé que no soy lo suficiente bueno para ti,
pero a veces solo quisiera tomar tu mano
y dejar que el mundo nos lleve a un lugar
donde solo seamos tu y yo.

A veces siento que caigo en un tormento,
a veces siento que me duele el corazón,
a veces siento que no soy lo que buscabas para amar.

No quiero escribir más sueños
solo deseo hacer una promesa en la cual te amare por siempre,
pero tú no me dejas continuar y destruyes mis ilusiones
permitiéndome caer y ya no se qué pensar de este amor.

El tiempo pasa entre los dos
y solo guardas silencio,
escapando de mis brazos
y es ahí cuando pregunto al cielo
que hice mal para sentir este dolor.

No quiero tristezas ya en mi vida,
solo quiero despertar y sentir una mano tibia,
quiero mirar y sentirme feliz,
pero aun no entiendo tu maldita forma de amar,
y me siento como una marioneta ante tus encantos.

A veces siento que caigo en el olvido,
a veces siento que me duele el corazón,
a veces siento que solo soy un tonto que aun intenta soñar.

No quiero sufrir, no quiero llorar,
no quiero seguir buscando sentimientos para continuar,
ya no quiero pensar,
solo quiero quedarme junto a ti.

Quiero tomarte de la mano y crear mil recuerdos más,
quiero que nuestras vidas sean una lucha de amor,
que vivamos un sueño y alcancemos una realidad,
pero aun no entiendo tu forma de amar
cuando me sueltas la mano y me dejas escapar,
haciéndome sentir un tonto que aun intenta soñar.

No era necesario



Cuando te conocí mire tus ojos y me sentí feliz,
pero no era necesario que me entregaras tu amor
y es que ahora nada de eso importa porque el silencio ya está aquí.
 
Cuando tomaste mi mano y me pediste que conquistara tu corazón,
no era necesario hacerlo si un día me ibas abrazar y luego solo huir
haciendo que mi vida se perdiera en el silencio del dolor.

Insisto no era necesario despertarme y hacerme el amor
si un día descubriría que estaría en mi cama con la soledad,
tampoco era necesario disfrazar de ternura tu piel,
ni dar esperanzas a mis locuras mientras nos besábamos
y prometíamos un tonto amor eterno.

Aunque no lo creas no era necesario robarme el corazón,
si lo único que pretendías era lastimarme con recuerdos de tu piel
y es que cuando te conocí me sentí muy feliz
pero no era necesario que me entregaras tu amor
y hacer que me volviera estúpido por soñar en vivir junto a ti.
                                         

Silencio (Parte II)


Solo soy un hombre con recuerdos,
con heridas y lamentos
que en la noche se escuchan en silencio.

Apaga las velas de mi habitación
y cuando todo quede en silencio,
observaras que el tiempo solo es tiempo,
que el recuerdo de un abrazo solo es un gesto sin emoción
y que la sonrisa que te hacia feliz solo es un disfraz
que ilumina tu rostro de ingenuidad.

Mira el cielo y nunca creas en el susurro del silencio
si no caerás en la ilusión de que tu corazón comenzó a olvidar
y descubrirás que todo el dolor que una vez se fue
volverá a nacer siendo que ya una vez le dijiste adiós.

Solo soy un hombre con sueños sin cumplir
quien descubre en su silencio una tormentosa manera de vivir.

Apaga las velas de aquella cena fría
que quedo en el olvido cuando el silencio invadió
dos corazones que alguna vez juraron amor eterno
y que de la nada se transformaron en dos desconocidos.

Apaga la llama de una vida
tal vez así te darás cuenta que mi boca perdió su sabor
y que ahora todo solo es un disfraz oscuro
para disimular el silencio que hay en una fría cama
cuando me voy a dormir sin sueños, ni esperanzas por volver amar.

Recorre el silencio de un cuaderno, de un poema,
camina por el sendero de mi oscuridad, de mi sangre
y verás que solo soy un hombre viviendo del silencio
que dejo una mujer en mi corazón cuando partió sin decir adiós.