Estaba sentado triste y abandonado,
recordando un pasado que me hizo llorar,
estaba triste y abandonado esperando la lluvia
mientras escribía un poema sin sentido,
pero como una luz de esperanza,
como un suspiro para mi corazón,
como una pastilla para el dolor,
escuche sus palabras,
leí sus mensajes
y mi corazón sin pensarlo dos veces renació,
se volvió un niño,
sonrió y comenzó a jugar,
creció dentro de mi pecho
y grito estas palabras sin temor.
Sé que soy un lobo solitario recorriendo este mundo,
sé que me acostumbre al dolor y al alcohol,
sé que aquel primer cigarro me hace relajarme,
pero al leer sus palabras,
al sentir que su corazón aun recuerda a este bohemio,
a este vagabundo del amor,
quiero dejarlo todo y renacer
volver a tener ese corazón de niño que tanto amaba,
quiero volver a jugar y escribir palabras con alegrías.
Estaba triste sentado en mi silla
con mi café y un cigarro al lado,
mirando como mis cuadernos envejecían
y mis palabras con mis poemas se extinguían en la soledad,
pero llego ella y alegro mi alma con un suspiro,
pensar... que me sentía olvidado,
perdido del mundo y ahora deseo con ansias
volver a tener un corazón de niño,
para demostrar que a pesar de todo aun puedo soñar.
Gracias querida amiga M.C.A.
Tus palabras alegraron mi corazón
cuando más lo necesitaba.
