Una rosa en tu corazón


Quiero tomar el tiempo y detenerlo,
escribir en tu pecho el dibujo de una rosa
y con mi aliento susurrarte besos que jamás cambiaran de posesión.

Deseo mirarte mientras estés durmiendo
y murmurar mis versos a media noche,
quiero jurarte con la mano en el corazón 
que mis sentimientos son puros
y prometo hacer lo imposible por compartir mi vida
sin importar las dificultades que se entrometan en nuestro camino.

Quiero acariciarte el pelo y entrelazar mis dedos,
ansiando que nuestras miradas juegan a enamorarse,
deseo que mis abrazos puedan robarte besos y morder suavemente tus labios
para luego respirar profundo y dibujar en tu pecho una rosa
que lleve la fragancia de nuestra pasión.

Solo quiero escribirte una canción que te haga suspirar,
solo deseo abrazarte y gritar que tu eres mi rosa de corazones,
aquella que ilumina con su fragancia cada segundo de mi vida,
aquella que me eleva hasta la luna
y me llena de palabras locas, de frases románticas,
de sentimientos suaves los cuales no puedo describir.

Hoy quiero abrazarte y llegar hasta las nubes,
volver y regalarte un beso en la frente,
jurarte de rodillas que mi amor será eterno,
que si tenemos una vida juntos esta no será un desafío,
habrán errores y piedras,
pero si entrelazamos sentimientos,
sabremos tomar el tiempo y detenerlo,
disfrutando cada momento,
superando todo pronóstico.

Quiero amarte toda la vida,
despedirme con un beso antes de ir a dormir,
quiero confortarme en tu pecho
y sentir los latidos de tu corazón 
cuando de mi voz se escucha un te amo.

Mientras pasan los días quiero tomar el tiempo y detenerlo,
hoy mi alma desea dibujar una rosa en tu corazón,
para luego susurrar rimas a las estrellas;
solo deseo despertar y tenerte a mi lado 
y en silencio, navegar por tu piel 
mientras mis labios se vuelven adictos
y mi piel pide recorrer un nuevo camino en el desierto
en el que tus manos sean mi estrella guía y tu sonrisa mi vida.

La vida debe continuar

Un miércoles cualquiera mirando el reloj,
bebiendo una pequeña cerveza,
escuchando melodías que no iluminan mi vida,
quiero llamar, quiero decir un hola como estas,
pero no puedo respirar,
no puedo escribir palabras,
no puedo caminar,
hoy mi vida no quiere continuar.

Déjenme estar aquí sentado mirando el mar,
permitan que mis hojas se ahoguen con cada brisa
y mis pies caminen descalzos por las rocas,
no sufro ninguna pena de amor, no sufro por la soledad,
solo por esta rutina de vida que ya no quiero continuar.

Miro el reloj y ya me quiero ir a dormir,
pero me da miedo volver a una cama vacía,
y despertar abrazado a la soledad, sin ganas de mirar el mundo,
no negare que desearía poder hablar con alguien antes de soñar,
que muero por llamar y que mis palabras sean como un amanecer,
pero sigo escondiéndome de toda la realidad,
sigo aquí amando a escondidas como si fuese un cobarde
y mi pequeño corazón ya comienza a preguntar,
porque aun no puedo vivir la vida como un ser normal.

Quisiera tener una vida,
abrazar sin tener miedo a encontrarme con la soledad,
mirar la playa y un amanecer sin preocupación
y sentir un suave beso antes de decir adiós,
pero sin darme cuenta me lleno de miedos,
de rutinas, de sueños, de latidos que susurran
que la vida debe continuar.