No puedo ser tan bueno

No se puede ser tan bueno en esta vida,

doy la espalda y me llenan de espinas

quemando las fotos de un recuerdo perfecto,

de una ilusión que se transformo en un sueño. 

Así que hoy empezaré por endurecer mi corazón

y dejare de ser tan bueno con aquellas almas

que conquistan mi vida

y así estar preparado para una nueva batalla

en la cual ya no deseo caer en el olvido

con un alma rota y mal herida.

Ya no puedo seguir dando mi alma sin medida

y es que en esta guerra siempre termino mal herido

rompiendo cartas y fotos de aquella ilusión.

No puedo ser tan ingenuo en este asunto,

la distancia solo es un espejismo que rompe el alma

y que a la vez llena un corazón con sentimientos puros

los cuales de la noche a la mañana mueren sin decir adiós.

Hoy ya no puedo ser tan bueno

si mi deseo es terminar victorioso en esta guerra

que aun ganas sin ni siquiera mover una pieza de mi existencia,

así que empezare por endurecer mi corazón

y así estar preparado para una nueva batalla

en la cual ya no caeré otra vez en el olvido

con un alma rota y mal herida.

Llorando el nombre de una mujer

En un triste despertar

comienzo a soñar que la vida

se me escapa sin sentidos

y solo pido mirar hacia un porque

el cual me enseñe a vivir

y es que ya no quiero acabar en el suelo

llorando el nombre de una mujer.

Quiero descansar mi alma,

mi corazón,

mis sentimientos,

hoy me harte de correr, soñar y llorar

el nombre de una fémina que se llevo mi vida.

Quiero romper esta maldición,

para luego caminar y olvidar,

hoy en mi silencio deseo arrancar y sepultar este dolor,

tal vez así pueda salvar mi alma, poemas y esta vida inútil.

Quiero sonreír y escribir por amor

ya no deseo narrar el olvido

hoy solo quiero descansar del llanto,

tal vez así pueda olvidar que soy el poeta de las cosas simples.

Hoy pido perdón a mi destino cruel

quién sabe si se apiada de mi

y me vuelva a mostrar el amor de verdad,

no pido mucho solo quiero un sueño,

una canción, un corazón nuevo

que no termine llorando el nombre de una mujer.

Soy el poeta de las cosas simples,

el soñador de las noches perdidas,

soy aquel que un día narro leyendas

y escribió poemas para algún ladrón que solo pidió su alma

cuando lloraba el nombre de aquella que robo su vida.

Hoy en mi triste despertar ya no encuentro vida,

pero deseo luchar a muerte

y volver a sonreír, descansar y luego encontrar nuevamente el amor

sin terminar llorando el nombre de una mujer.

Mirando como las rocas juegan a partirle el alma en dos

Despertando descubro que soy aquel poeta de tristezas,
aquel niño que ya no recibirá abrazos ni llamadas que alegren su corazón,
el cual no podrá mirar el cielo y el brillo de sus ojos,
aquel que ya no encontrara la felicidad en algún baúl de recuerdos,
solo será el poeta que se quedo mirando 
como las rocas jugaban a partirle el alma en dos.

Ahora seré aquel que ya no podrá acariciar el silencio de su voz,
quien despertara solitario en una cama y sin ganas de vivir,
solo seré el bohemio que fumara por las noches
hasta que el alcohol le dé un beso de despedida
y las rocas de la calle le enseñen a caer otra vez.

Despertando descubriré que otra vez me abandono la felicidad
dejándome con rocas que juegan a partirme el alma en dos.

Hoy seré yo quien llora otra vez en soledad, 
quien ya no recibirá abrazos ni llamadas que alegren su corazón,
solo seré un poeta más que se quedara mirando
como las rocas juegan a partirle el alma en dos.